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Marcelo Salas en la Juventus Football Club

 

Marcelo Salas se incorporaría a la disciplina de la Juventus Football Club el verano de 2001, tras rechazar ofertas de media Europa, y quedarse a tan solo un paso de acompañar a Zinedine Zidane en el Real Madrid.  Con el conjunto de la Vecchia Signora, «El Matador» chileno ganaría dos Scudetti (2001-02 y 2002-03), la Supercoppa Italia de 2002 y 2003, y alcanzaría la final de la Liga de Campeones de 2003.

Pero no todo fueron alegrías, ya que su estancia en Turín acabó de la peor de las maneras debido a las consecuencias de haber sufrido una grave lesión. Treinta y dos apariciones y cuatro goles, serían su triste balance final.

 

 

El adiós a la SS Lazio, y la bienvenida en la Vecchia Signora

Durante el verano de 2001, Sergio Cragnotti (presidente la SS Lazio) y Luciano Moggi (mánager de la Juve) entablaron negociaciones en la Costa Esmeralda por el delantero natural de Temuco, cerrando finalmente su pase sobre la base de veinticinco mil millones de liras. «Estar en la Juventus es una recompensa por todos los sacrificios realizados en el pasado. Me gusta mucho el ambiente que encontré en Turín. Un gran equipo también se ve por el club que lo respalda, y este es realmente excepcional, organizado a la perfección», confesaba Marcelo.

 

 

El futbolista ya había confesado previamente sus ganas de vestir la camiseta «bianconera», y no puso ningún reparo a la operación. Delantero potente aunque de escasa corpulencia (1,73 m, 73 kg), muy activo, excelente jugador con la cabeza, militaba en el conjunto romano desde hacía dos temporadas, aunque nunca consiguió hacerse con una verdadera plaza de titular, y pasó varios partidos en el banco de suplentes.

 

 

La lesión que acabó con su carrera en la Serie A

Bolonia-Juventus, 20 de octubre de 2001, la rodilla del chileno cede. El diagnóstico es escalofriante: esguince en la rodilla derecha con lesión del ligamento cruzado anterior, su temporada está prácticamente acabada. Salas se lo toma con filosofía: «Tranquilos, estoy sereno. Cuando vuelva al campo, seré más fuerte que antes, para compensar la pasión y la amistad que me han demostrado los aficionados del Juventus’. Lippi también lo lamentaba: «Lo siento sobre todo por el hombre, Marcelo había encajado con gran humildad y gran seriedad. Desde el punto de vista técnico su lesión es muy grave, perdemos un jugador de calidad, prestigio y experiencia».

 

 

Marcelo regresó la temporada siguiente muy eufórico; sin embargo, los biaconeri se cubrieron ante cualquier eventualidad, y compraron a Di Vaio. «Quiero ayudar a la Juventus a retener el título de campeón y ganar la Liga de Campeones de Europa», indicaba el chileno. Pero la realidad fue que «El Matador» solamente pudo jugar de titular en la Supercoppa Italia anotando un gol en el triunfo de Juventus por 2-1 ante el Parma en Trípoli (Libia).

A partir de aquel momento fue confinado al banco de suplentes o a la tribuna por parte del entrenador, Marcello Lippi. La situación provocó el malestar de Salas, que aunque aseguró tener paciencia, también advirtió que la «la misma tiene un límite». Al final del campeonato hizo muy pocas apariciones y fue puesto en el mercado. Moggi querría venderlo al Sporting de Lisboa, a cambio de un delantero portugués de 17 años que estaba haciendo maravillas en el club lusitano.

El propio Moggi lo relataba hace poco: «Habíamos llegado a un acuerdo con el Sporting de Lisboa sobre la base de un intercambio con Marcelo Salas, que entonces prefirió marcharse a River Plate. No teníamos dinero para comprarlo y la operación no se cerró. Entonces llegó el Manchester United con una oferta muy elevada. ¿El nombre de ese joven? El futuro CR7, alias Cristiano Ronaldo».

 

 

¿Vuelta a la Lazio o rumbo al Camp Nou?

Después de dos temporadas traumáticas en la Juventus, el diario «Corriere dello Sport» aseguraba que su vuelta a la Lazio era una posibilidad real, aunque el FC Barcelona también estaba al acecho. «Salas puede regresar a la Lazio: la Juventus está dispuesta a cederlo en préstamo a cambio de (Giuliano) Giannichedda y agregando 12 millones de dólares para obtener al centrocampista en enero en su plantel. Salas viene de una delicada operación en los ligamentos cruzados de la rodilla derecha y hasta hoy no encuentra espacio en Juventus», explicó el rotativo, que añadía: «El chileno confesó sentirse molesto por su suplencia y si bien no llegó a una rotura de relaciones, no quiere ser recambio de Del Piero, Trezeguet, Di Vaio y Zalayeta».

Finalmente, estas dos opciones cayeron, y en 2003 retornó a Sudamérica, en gran parte debido al divorcio con su exesposa y para estar cerca de sus hijas que vivían en Chile, regresando en calidad de préstamo a River Plate (por entonces dirigido por su compatriota Manuel Pellegrini).