La selección de Nigeria visitó por primera vez Europa en 1949, concretamente el Reino Unido, en una gira de partidos amistosos contra clubes amateurs para poner a prueba su fútbol de pies descalzos, entrega y por encima de todo pasión. Una bella historia de football que nos sumerge en otra época muy distinta a la actual.
La expedición africana llegó al puerto de Liverpool sobre el barco Elder Dempster, MV Apapa. Eran las 8.30 de la mañana del lunes 29 de agosto de 1949, y a bordo iban dieciocho jugadores, el capitán Donald.H.Holley {Presidente de la Asociación de Fútbol de Nigeria} y su esposa. La expedición viajó hasta el Reino Unido para jugar nueve partidos amistosos para probar su nivel contra el fútbol amateur europeo.
Trece de los dieciocho jugadores procedían de la Liga de Lagos y del Distrito, dos de las Provincias Occidentales, dos de las Provincias Orientales y uno de las Provincias del Norte. No hay que olvidar que la primera liga de Nigeria no fue creada hasta años después, en 1972.
La gira contó con la bendición y el respaldo del Gobernador General de Nigeria, John Macpherson. Éste envió una carta a la Asociación Inglesa de Fútbol unos meses antes del viaje para agradecerle que permitiera a los jugadores hacer una gira por el Reino Unido. Además era el primer viaje por mar de los jugadores y temían que se marearan durante las dos semanas de viaje desde Lagos a Liverpool. Por suerte ninguno enfermó, y además se mantuvieron en forma para la gira corriendo por la cubierta del barco cada mañana y cada tarde.
El conjunto nigeriano fue recibido por Andrew Ralston, representante de la Asociación Inglesa de Fútbol, y por John Finch, un exjugador del Fulham, que sería su entrenador durante la gira. También había varios periodistas de prensa y radio esperando para entrevistar a los jugadores y a Holley. Etim Henshaw, el capitán del equipo, dijo en una de esas entrevistas que «viajamos en tercera clase, pero todos los que estaban a bordo nos trataron como pasajeros de primera». Holley y su esposa, Dorothy, habían viajado en primera clase.
Dos días después de llegar a Liverpool, los jugadores nigerianos disputaban el primer partido de su gira contra el Marine Crosby Football Club. Los nigerianos vestían camisetas verde oliva y pantalones cortos blancos, y jugaban descalzos con tiras de esparadrapo blanco alrededor de los dedos gordos de los pies para evitar que se rompieran. También llevaban tobilleras y rodilleras elásticas blancas y medias de fútbol verdes cortadas para dejar a los dedos de sus pies libres. Todos excepto uno, Dokubo, que llevaba zapatillas de lona de suela ligera porque estaba acostumbrado a ellas. Hubo muchos «oohs» y «aahs» de los espectadores cuando los pies descalzos de los jugadores entraron en contacto con el duro balón de cuero y aquellas botas con clavos de hierro, pero los nigerianos no se inmutaron.
Len Carney, capitán del Marine Crosby, dijo al final del partido que «pronto descubrimos que sus pies eran más duros que nuestras botas». Los aficionados instaron a los jugadores del Marine Crosby a quitarse las botas con la esperanza de que eso les ayudara a jugar tan bien como los nigerianos descalzos. Un nutrido grupo de africanos occidentales de Manchester formó parte de los 6.000 espectadores que presenciaron este partido. El equipo nigeriano venció por 5-2 a Marine Crosby.
El árbitro del partido admitió después que «no había visto antes a futbolistas descalzos, pero, por descontado, estos chicos son buenos». Los espectadores saltaron al campo tras el partido y llevaron a los victoriosos nigerianos a hombros hasta el vestuario. El Marine Crobsy Football Club donó a la Asociación de Fútbol de Nigeria la recaudación total del partido contra el equipo nigeriano. Esta cantidad ascendió a 200 libras esterlinas.
El equipo viajó a Darlington dos días después de su partido contra el Marine Crosby para jugar su segundo partido contra el Bishop Auckland Football Club. Dos partidos en seis días y siete cambios en el equipo resultaron ser demasiado para el equipo nigeriano y sucumbieron por 5-2. D.H. Holley aseguró a los jugadores que no jugaron el primer partido que jugarían el segundo contra el Bishop Auckland. De este modo, se aseguraba que todos los jugadores de la plantilla tuvieran la oportunidad de jugar al menos un partido durante la gira. La selección del equipo para el resto de la gira se basó en el mérito. Más de 13.000 espectadores presenciaron el partido de Bishop Auckland.
El equipo viajó desde Darlington el 4 de septiembre en tren hasta la estación de King’s Cross, en Londres, y se trasladó en autocar a su base londinense, la residencia del British Council. El equipo jugaría seis partidos en Londres.
Los organizadores de la gira dispusieron que cuatro mujeres nigerianas, esposas de funcionarios del gobierno nigeriano destinados en Londres, ayudaran a cocinar las comidas de los jugadores durante su estancia en la capital. Esto se debió a que a los jugadores no les gustaba mucho la cocina inglesa. Las mujeres utilizaron los alimentos que los jugadores trajeron de Nigeria. Una de ellas dijo al ser entrevistada durante una sesión de cocina: «¿Sabe qué es lo que más les gusta a nuestros chicos? Mucha, mucha agua fría. Su clima es demasiado caliente para ellos». 1949 está considerado como uno de los años más calurosos en Inglaterra desde que se llevan registros. La temperatura para septiembre en Londres se acercó a los 30°C en su punto máximo.
Los jugadores fueron tratados como la realeza durante su gira, agasajados en todas partes con recepciones y cenas en su honor. Esto ocurrió en todas las ciudades y pueblos en los que estuvieron y jugaron. La Asociación Inglesa de Fútbol, en una recepción para el equipo, entregó una placa a la Asociación Nigeriana de Fútbol para conmemorar la gira del equipo. Se entregaron a los jugadores insignias de solapa, ceniceros y libros. La Asociación de Fútbol de Nigeria correspondió regalando dos cajas de cigarrillos de ébano y marfil a la Asociación de Fútbol de Inglaterra.
Los récords de asistencia a los partidos de la selección nigeriana se batieron en seis de sus nueve encuentros. Los jugadores atrajeron la atención de la prensa. Había algo misterioso en un equipo de futbolistas descalzos que captaba la imaginación del público inglés. El último partido de la gira fue en Liverpool contra el South Liverpool Football Club, que se jugó bajo los focos. El South Liverpool F.C. fue uno de los primeros clubes del país en tener focos permanentes. El club invitó al alcalde de Liverpool (Alderman J.J. Cleary) a encender los focos para el partido. Los balones del partido tuvieron que ser pintados de blanco para que fueran visibles para los jugadores y los espectadores durante el partido.
El equipo nigeriano ganó dos, empató dos y perdió cinco partidos durante su gira. Acostumbrados a jugar partidos de 70 minutos en Nigeria, tuvieron que jugar partidos de 90 minutos durante su gira por el Reino Unido. Naturalmente, sufrieron físicamente, sobre todo en las segundas partes de los partidos. La derrota más abultada de la gira fue un 8-0 ante el equipo representativo de la liga ateniense. El día de este partido (21 de septiembre) llovió mucho, lo que provocó un terreno de juego resbaladizo y embarrado que perjudicó a los nigerianos. Ocho de los jugadores empezaron el partido descalzos, pero tuvieron que ponerse botas en la segunda parte porque les costaba mantenerse en pie. Las botas no les ayudaron porque no estaban acostumbrados a jugar con ellas.
El equipo nigeriano partió de Liverpool hacia Lagos el 29 de septiembre a bordo del R.M.M.S Accra. Los jugadores, de nuevo, viajaron en tercera clase. Etim Henshaw, el capitán del equipo, se quedó en el Reino Unido para hacer los exámenes de la Junta de Comercio en Ingeniería Marina. Un año después volvió a Lagos en el Tamele (un barco de Elder Dempster) vía Liverpool. Viajó en primera clase.
Un resultado importante de la gira por el Reino Unido de 1949 fue que abrió la puerta a la migración de futbolistas nigerianos al país. Algunos miembros de la gira de 1949 regresarían y se convertirían en la primera generación de futbolistas nigerianos en jugar en clubes ingleses: Ottun (South Liverpool F.C.), Titus Okere (Swindon Town) y Tesilimi Balogun (Peterborough United y Queen’s Park Rangers).
La gira nigeriana de 1949 también allanó el camino para otras giras de fútbol africano al Reino Unido: la de la Costa de Oro (Ghana) de 1951 y la de Uganda de 1956. En 1958, la Asociación Inglesa de Fútbol envió un equipo inglés a una gira por Nigeria y Ghana. Ganaron la mayoría de sus partidos en ambos países.
Jan Stewart