Lionel Messi fue el discípulo favorito de Ronaldinho en el Camp Nou, un hecho que facilitó claramente la adaptación del delantero argentino en el primer equipo azulgrana. Su amistad se iniciaría en 2005, cuando Ronaldinho acababa de ser nombrado Mejor Jugador del Mundo por la FIFA. Tras el primer entrenamiento del argentino con el primer equipo, fue Ronaldinho quien insistió en acercarse al argentino, llevándolo a sentarse entre las estrellas de la plantilla. «Soy muy tímido, me cuesta adaptarme», dijo Messi, que entonces solamente tenía 17 años.
Tal era el aprecio del brasileño, que incluso encontró la manera de quedar grabado para siempre en la memoria de su discípulo y en su carrera. En un partido contra el Albacete en 2005, Ronaldinho ayudó a Messi a marcar su primer gol con el Barcelona, momentos después de que a Messi le anularan un gol similar por fuera de juego. «Podía haber hecho muchas cosas en esa jugada, pero prefirió esperar y darme la asistencia», recuerda Messi con una sonrisa. Ronaldinho añade entre risas: «Nunca olvidará ese primer gol suyo. Y, cuando lo recuerde, se acordará de mí. Yo di el pase».
Los dos disfrutaron juntos de momentos importantes, como la conquista de los títulos de LaLiga española en 2004/05 y 2005/06, así como la Liga de Campeones de 2006. Ronaldinho vio florecer a Messi hasta convertirse en un jugador excepcional y, poco antes de marcharse, le vio ascender al trono. El partido en el que Messi demostró realmente al mundo lo bueno que era fue el 3-3 contra el Real Madrid en el Camp Nou, cuando el argentino marcó tres goles.
Ronaldinho acabó dejando el FC Barcelona en junio de 2008 para fichar por el AC Milan. Josep Guardiola acababa de asumir el cargo de entrenador y comenzó el verdadero reinado de Messi, que ganó el Balón de Oro al mejor jugador del mundo durante cuatro años consecutivos. Messi, sin embargo, desearía que su mentor hubiera permanecido a su lado un poco más .
«Lo que pasó fue feo. No se merecía eso después de todo lo que hizo por el club cambiando la historia del Barcelona. La forma en que se fue, fue muy extraña», dice Messi sobre la marcha de Ronaldinho.
En uno de sus últimos entrenamientos juntos, Ronaldinho le dijo a Messi que podía llevarse su camiseta con el número 10. El argentino aceptó encantado el honor, pero se mostró triste por la marcha de su amigo. Y añade: «Me hubiera gustado pasar un par de años más con él».
Messi en 2018 publicaría en su Twitter una dedicatoria tras el anuncio de la retirada del 10 brasileño, «como siempre dije, aprendí mucho a tu lado. Siempre te estaré agradecido por lo fácil que me hiciste todo cuando llegué al vestuario. Tuve la suerte compartir muchas cosas con vos y me alegro muchísimo porque, además de un fenómeno con la pelota, sos una grandísima persona y eso es lo más importante. Aunque decidas irte, el fútbol no se olvidará de tu sonrisa jamás. Todo lo mejor, Ronnie».
Las estadísticas finales de su dupla fueron 80 partidos juntos, sumando 4.805 minutos compartidos sobre el terreno de juego entre 2005 y 2008.
