spot_img

Piacenza Calcio, los lejanos años en la Serie A

 

El Piacenza Calcio, fundado en 1919 por un grupo de estudiantes y trabajadores locales, nació en la ciudad que le da nombre, ubicada en la llanura Padana, situada en la orilla derecha del río Po y que confluye con el río Trebbia y el torrente Nure. Por sus filas han pasado grandes talentos futbolísticos como los hermanos Inzaghi (Filippo y Simone), Ignazio Abate, Amauri, Antonio De Vitis, Dario Hübner, Enzo Maresca o Pietro Vierchowod, entre otros.

Famosos en Italia por su firme filosofía de apostar solo por jugadores nacionales, I Lupi no alinearon a ningún futbolista extranjero hasta la temporada 2000-2001. De hecho, con la ayuda del veterano goleador Dario Hübner, el equipo logró mantenerse en la Serie A en una época en la que el fútbol italiano estaba en su apogeo y era considerado el mejor del mundo.

 

 

El Piacenza y su histórica llegada a la Serie A

El 13 de junio de 1993, tras su victoria en Cosenza, el Piacenza Calcio consiguió por primera vez en su historia el ascenso a la Serie A. Al regreso del equipo, un estadio Galleana repleto de aficionados celebraba eufórico su hazaña a media noche. Aquella campaña 1992-93 el club finalizó como tercero con 48 puntos en la Serie B, que entonces otorgaba a tal plaza un ascenso directo a Serie A. Gran parte del mérito fue el liderazgo de su gran su figura, Antonio De Vitis que marcó 19 goles ese año.

 

 

El posterior debut en la máxima categoría tuvo lugar el 29 de agosto de 1993 contra el Torino FC de Mondonico, que se impuso 3-0 en el estadio Galleana. La primera victoria llegó en la quinta jornada, con un 2-1 sobre el Lecce. A pesar de las dificultades iniciales, el equipo de Gigi Cagni fue creciendo semana tras semana, convirtiendo la Galleana en uno de los estadios más difíciles de toda la Serie A: después del Torino, solo la Lazio logró vencer en Piacenza. Destacó también su participación en la Coppa Italia, donde eliminó sorprendentemente al todopoderoso AC Milan, gracias a un letal contraataque culminado por Giampiero Piovani.

 

 

A finales de marzo de 1994, la permanencia en la Serie A parecía asegurada, pero una mala racha y la remontada de la Reggiana pusieron todo en entredicho. En la penúltima jornada, la Juventus visitó Piacenza y el partido terminó 0-0, aunque al equipo local le fueron anulados dos goles (marcados por Moretti e Iacobelli). Mientras tanto, la Reggiana empató 1-1 en casa contra la Sampdoria.

Todo se decidió en la última jornada. El Piacenza tuvo que adelantar su partido al viernes, ya que el Parma disputaría la final de la Recopa de Europa el miércoles siguiente. El 29 de abril de 1994, en el estadio Tardini de Parma, el encuentro terminó 0-0, con otro gol anulado a Ferrante. Dos días después, el 1 de mayo de 1994, la Reggiana logró una victoria histórica en San Siro contra el AC Milan y consiguió la permanencia en la Serie A, a costa del Piacenza. De nada sirvió tener una plantilla con talentos como Massimo Taibi, Daniele Moretti, Giampero Piovani o Agostino Iacobelli, sin olvidarnos de un joven Simone Inzaghi o del consolidado De Vitis.

Sin embargo, el Piacenza se repuso de la caída y la temporada 1994-95 se proclamó campeón de la Serie B el 7 de mayo de 1995 ante el Ancona, logrando un rápido regreso a la máxima categoría.

 

 

El segundo periodo en Serie A

El 15 de junio de 1997 se vivió uno de los momentos más emocionantes en la historia del club: el desempate contra el Cagliari, disputado en Nápoles, con la permanencia en la Serie A en juego. Más de 5.000 aficionados biancorossi viajaron hasta Nápoles para apoyar a su equipo. Contra todo pronóstico, el Piacenza venció y condenó al Cagliari al descenso.

El equipo disputó tres temporadas más en la Serie A antes de un nuevo descenso, seguido de una rápida promoción. En la temporada 2001-02, el Piacenza logró la permanencia, y su delantero Dario Hübner se consagró como máximo goleador de la Serie A con 24 goles, empatado con David Trezeguet de la Juventus. La temporada 2002-03 marcó el regreso del Piacenza a la Serie B.

Aquellos años en Serie A el Piacenza dispuso de jugadores como Pietro Vierchowod, Giovanni Stroppa, Giampiero Piovani, Roberto Murgita, Simone Inzaghi, Alessandro Lucarelli, Alberto Gilardino, Arturo Di Napoli, Francesco Zerbini o Ruggiero Rizzitelli, entre otros.

 

 

Caída al abismo hasta desaparecer… y renacer

Durante los siguientes ocho años, el equipo militó en la Serie B. La temporada 2010-11, la plantilla se formó con jugadores cedidos, jóvenes promesas y futbolistas sin contrato. Regresaron figuras como Armando Madonna al banquillo y Volpi y Cacia al campo. Tras un pésimo comienzo (solo 2 puntos en siete partidos), el equipo logró una leve recuperación, pero un desplome en primavera lo llevó a disputar los playout contra el Albinoleffe. Dos empates sellaron el descenso del Piacenza a la Lega Pro Prima Divisione. Tras el descenso y en medio de la indignación por la falta de medidas de la federación en un escándalo de apuestas ilegales que involucraba a varios jugadores biancorossi (posible causa de su crisis de resultados), la directiva del Piacenza anunció su intención de no inscribir al equipo en ninguna competición para la temporada 2011-12.

Sin embargo, el 29 de junio, el club cambió de postura y el Piacenza regresó a la tercera división (renombrada como Prima Divisione y actualmente conocida como Serie C). El 28 de octubre, tras meses de negociaciones, el presidente Fabrizio Garilli vendió el club a un grupo de empresarios. Sin embargo, tras unas pocas semanas, Garilli volvió a tomar el control del equipo. El 22 de marzo de 2012, el Piacenza fue declarado oficialmente en quiebra. En la temporada deportiva, el equipo perdió el playout contra el Prato y descendió a la Lega Pro Seconda Divisione. Con ello, la era de la familia Garilli, que había dirigido el club durante 29 años, llegó a su fin.

El Piacenza se encontró en la cuarta categoría del fútbol italiano, exactamente en el mismo nivel en el que estaba cuando Leonardo Garilli lo tomó. Pero eso pronto pasó a un segundo plano, ya que el 19 de junio de 2012, sin compradores en la subasta de quiebra, el Piacenza desapareció definitivamente.

En la Serie Eccellenza el equipo Lupa Piacenza se erigió como sucesor del equipo, esa temporada logró el liderato y el ascenso a Serie D donde pudo refundarse como SSD Piacenza Calcio 1919 donde aún actualmente compite.