Jorge Alcover se convirtió a principios de 1991 en el último talento español en probar suerte en el fútbol inglés pre Premier League. Un muchacho barcelonés, de tan solo 15 años, por aquel entonces, que se estaba formando en el equipo de fútbol del Col·legi Sant Ignasi de Sarrià.
Su corta aventura empezó cuándo el Everton le invitó, aprovechando un viaje de estudios a Liverpool, a participar con el juvenil en un torneo. Su gran actuación le permitió recibir una oferta formal para incorporarse a la academia de los «blues», aunque finalmente sus padres la rechazaron anteponiendo su formación académica.
Jorge comentó en una pequeña entrevista a la revista Don Balón que «jugar en el Everton sería increíble. Es el club de mis sueños y me gustaría muchísimo». Entre sus ídolos se encontraban Paul Gascoigne, y era seguidor del FC Barcelona, aunque su verdadera admiración era «para los equipos que desarrollan buen fútbol». Finalmente, Jorge Alcover siguió el consejo de sus padres, aparcó su posible salto al fútbol profesional, y actualmente trabaja en Goldman Sachs.
