Hugo Sánchez fue una de las estrellas que reclutó el Mundial de Estados Unidos de 1994, aunque el mexicano no brilló en aquella mítica cita mundialista. El que fue el octavo partido de Hugo Sánchez en la Copa Mundial de la FIFA tuvo como rival a Noruega en un partido que finalizó en empate y en el que pudimos ver una de las acciones más habituales del 9 azteca: la chilena y su característica forma de levantarse del suelo.
“Lamentablemente con la Selección Nacional no pudimos conseguir los resultados esperados. En 1994 ya no quería jugar el Mundial, pero me convenció Miguel Mejía Barón, aunque había gente que me quería fuera de la Copa del Mundo. En una reunión en la casa de su hermano, Miguel Mejía Barón, no solo me convenció de ir al Mundial, sino que me dijo textualmente ‘van a por ti’. La historia es que antes de esa reunión Emilio Azcárraga le dijo a Miguel que si le tienes que cortar la cabeza a Hugo, no llevarlo y no volver a convocarlo nunca más, adelante que yo te apoyo. En 1993 estábamos tratando de formar la Asociación de Jugadores porque estábamos en contra del Draft y de la explotación de los jugadores. Azcárraga me veía como el cabecilla de todo ese movimiento”, asegura el delantero mexicano.
