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François Zahoui, el primer africano de la Serie A italiana

 

François Zahoui aterrizó con tan solo 20 años en Italia, el verano de 1981, para unirse al Ascoli Calcio tras impresionar en un torneo juvenil de Marsella con el Stella Club d’Adjame de Abidjan, su club formativo. Los italianos pagaron por él diez millones de liras italianas, ofreciéndole un salario mínimo de 1,2 millones de liras al mes, además de un regalo de cuatro millones de liras del presidente del club, que el joven envió a su familia.

El Ascoli venía de una temporada difícil, habiendo evitado el descenso a la Serie B por poco. Terminaron en décimo lugar entre 16 clubes, igualados en puntos con los cuatro equipos debajo de ellos, pero con mejor registro en enfrentamientos directos. Para el jugador, que podía jugar tanto como delantero puro como mediapunta, el traspaso suponía el salto definitivo al profesionalismo, teniendo en cuenta que trabajaba a media jornada para una empresa que distribuía agua mineral.

 

 

Por aquel entonces, los clubes de la Serie A no buscaban talento en el extranjero debido al bajo rendimiento del equipo nacional en la Copa del Mundo de 1966, que se atribuyó a la presencia de demasiados jugadores extranjeros en la liga. Por esta razón, no se permitió la entrada de nuevos jugadores extranjeros entre aquel año y 1980. Además, Italia era un país con alta emigración y poca inmigración.

Al inicio de la temporada 1981-82, Zahoui se convirtió en uno de los únicos 18 extranjeros en la liga, y aunque este número aumentó a 32 la siguiente temporada, él seguía siendo el único africano. Claudio Gentile, nacido en Libia de padres italianos, no contaba como jugador africano.

 

 

Zahoui fue apodado «Negretto» y más tarde «Zigulì» por un dulce de fruta italiano, y fue uno de los favoritos de la afición. En una entrevista con La Stampa, dijo: “No soy un goleador. Juego con el número 10 y sé cómo pasar bien el balón a mis compañeros. ¡También marco algunos goles, pero no muchos! Ya estoy enamorado de esta tierra y del afecto de los italianos, me gusta mucho Ascoli”. Sin embargo, su llegada coincidió con el arresto del defensor de Ascoli, Angiolino Gasparini, por posesión de cocaína.

 

 

Se rumoreaba que el entrenador de Ascoli, Carlo Mazzone, no tuvo voz en la contratación de Zahoui, pero después de unas semanas lo elogió. “He cambiado de opinión. Zahoui ha demostrado ser una persona educada, reservada y muy atenta. Debe haber tenido una buena crianza: le enseñaron cómo comportarse en el mundo. Creo que estudió bien: además de su lengua materna, también habla inglés correctamente”. Finalmente el 27 de septiembre de 1981, en el Stadio Artemio Franchi de Florencia, François Zahoui hizo historia al convertirse en el primer jugador africano en jugar en la Serie A. Entró como sustituto en la segunda mitad del partido contra la Fiorentina, que terminó en empate 0-0.

 

 

A pesar de su talento y el apoyo de la afición de Ascoli Piceno, Zahoui tuvo dificultades para integrarse en el equipo. A menudo se sentía excluido y le daban la tarea de perder tiempo en los últimos minutos de los partidos fuera de casa, pero siempre cumplía con lo que le pedían. La liga italiana era más compleja y física de lo que estaba acostumbrado, y solo hizo ocho apariciones en su primera temporada. Sin embargo, contribuyó a que Ascoli terminara en un impresionante sexto lugar, perdiendo solo una vez en casa. La temporada siguiente, Zahoui hizo solo tres apariciones mientras el club luchaba nuevamente contra el descenso.

En busca de un mejor ambiente, Zahoui se trasladó al equipo francés AS Nancy en el verano de 1983, donde se convirtió en un jugador clave, haciendo 112 apariciones en cuatro temporadas y anotando ocho goles. También fue convocado por primera vez a la selección nacional de Costa de Marfil, con la que llegaría a disputar 10 encuentros. Cuando el Nancy descendió en 1987, Zahoui se unió al Toulon de David Ginola, donde hizo otras 109 apariciones en cinco temporadas, anotando cinco goles. En 1992, se trasladó al equipo aficionado francés Nevers antes de retirarse.