El sorteo de la clasificación para la fase final de la Copa del Mundo de 1998 tuvo lugar en el Museo del Louvre de París el 12 de diciembre de 1995. Como anfitriona del torneo, Francia estaba exenta del sorteo, al igual que el campeón defensor, Brasil. Participaron 174 equipos de seis confederaciones, 24 más que en la ronda anterior. Catorce países se clasificaron de la zona europea (además del anfitrión).
Tras la fase de grupos se determinaron diez: nueve ganadores de grupo y el mejor segundo clasificado; los otros ocho subcampeones de grupo se sortearon en parejas de cuatro partidos de repesca, y los ganadores se clasificaron también para la fase final. La CONMEBOL (Sudamérica) y la CAF (África) obtuvieron cinco plazas cada una en el torneo final, mientras que tres plazas se disputaron entre los 30 miembros de la CONCACAF en la zona de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe. El ganador de la zona oceánica avanzó a una eliminatoria intercontinental contra el subcampeón de la eliminatoria asiática, determinada por los dos mejores segundos clasificados.
Durante las eliminatorias se pulverizaron todos los anteriores registros: se jugaron 643 partidos con más de 15 millones de espectadores. Hubo también algunos récords individuales: Irán venció a Maldivas por la mayor diferencia en la historia de la Copa Mundial de la FIFA hasta ese entonces, con un resultado de 17-0. Karim Bagheri marcó siete de los tantos, y también supuso una nueva marca para la historia. Aquella Irán del goleador Ali Daei prosiguió acaparando los titulares como equipo revelación: en una decisiva eliminatoria AFC/OFC contra Australia. Los locales se pusieron con 2-0 en el marcador, pero los iranís restablecieron la igualada ante la consternación de los 85.000 espectadores que abarrotaban el Melbourne Cricket Ground. Ya se habían clasificado la República de Corea, que se estaba haciendo un auténtico asiduo, y por segunda vez consecutiva, Arabia Saudí.
En Europa se fijaron por primera vez eliminatorias entre los segundos de grupo. Noruega, Italia, España, Alemania y Rumanía se clasificaron sin conocer la derrota, pero a Italia ni siquiera le valieron cinco triunfos y tres empates para alcanzar la cabeza de su grupo, en el que se impuso Inglaterra. Un gol de Tony Cascarino para la República de Irlanda en el último partido, contra Rumania, le dio a su selección el 1-1 y echó por tierra el pleno de victorias rumanas. En las eliminatorias, Yugoslavia causó impacto con un marcador global de 12-1 ante una desdibujada Hungría. Sin ser algo inesperado, Croacia, una de las nuevas naciones de Europa, pudo estrenarse en una fase final, tras eliminar a la prometedora Ucrania de Shevchenko y Rebrov.
En Sudamérica, donde la fase preliminar se disputó por primera vez en un único grupo, se jugaron nada menos que 72 partidos. Las selecciones que terminaron en lo más alto fueron Argentina, Paraguay, Colombia (clasificada por tercera vez consecutiva) y Chile.
La fase de clasificación más larga fue, como de costumbre, la de la zona de la CONCACAF, donde los favoritos, México y Estados Unidos, salieron airosos sin encontrarse apenas con obstáculos en el camino. El tercer billete fue a parar a la debutante, Jamaica, y los Reggae Boyz confirmaron de esta manera su progresión de los últimos años. Llamó la atención que México, que había quedado invicta en la fase de clasificación y tenía asegurada una plaza en Francia, destituyese a su seleccionador, Bora Milutinović, tras una racha de resultados desalentadores.
En África fueron las selecciones consagradas las que estuvieron a la cabeza: tanto Nigeria como Camerún, Túnez y Marruecos ya se habían clasificado en anteriores ocasiones. La única novedad fue Sudáfrica, pero su éxito apenas puede considerarse una sorpresa, en vista del potencial de sus jugadores y de su victoria en la Copa Africana de Naciones de 1996. Sin embargo, Congo estuvo a punto de dar la campanada el 16 de agosto de 1997 en Johannesburgo, cuando un solitario gol decidió que sería Sudáfrica y no Congo quien obtendría la última plaza para el Mundial de Francia.
Croacia, Jamaica, República Federal de Yugoslavia, Japón y Sudáfrica debutarían así en la Copa del Mundo. Mientras que las grandes ausentes serían la Portugal de Luis Figo y Rui Costa, y la Uruguay de Recoba y Francescoli.