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Andreas Köpke en el FC Barcelona, historia del no fichaje

 

Andreas Köpke llegó al Camp Nou como portero titular de la Alemania que conquistó la Eurocopa de 1996 para pasar el reconocimiento médico. Su fichaje por el conjunto azulgrana ya se daba totalmente por hecho el 22 de junio de 1996, posteriormente apareciendo en diversas portadas posando con una bufanda azulgrana, y asegurando que el contrato lo ligaba por dos años, con opción a un tercero.

«Mire, le voy a repetir lo mismo que he dicho a sus colegas alemanes: soy a todos los efectos jugador del FC Barcelona los próximos dos años, con posibilidad de extender mi contrato un año más. El asunto se resolvió en poquísimo tiempo, durante la Euro. No firmé con el Sttutgart por haber existido cinco peticiones mías que no fueron aceptadas. Así de simple. En USA ’94 debí ser alineado yo, y no a Bodo Illgner. A partir de ahora mismo comenzaré un curso acelerado de castellano para que mi adaptación sea más fácil», aseguraba el campeón alemán.

 

 

El guardameta llegaba libre tras el descenso del Eintracht de Frankfurt a la segunda división de Alemania. Con 34 años, Andreas Köpke estaba en el cenit de su carrera y se iba a erigir en la solución de emergencia que el Barça post-Cruyff ideó como alternativa al fichaje del portugués Vítor Baía, el checo Petr Kouba y el austriaco Frank Wolfard.

 

 

Cuando todo parecía hecho (hasta se había buscado y encontrado un colegio alemán para sus hijos), el FC Barcelona anunció el fichaje del cancerbero portugués. De esta historia existen dos versiones: una en la que asegura que Vítor Baía finalmente bajó sus pretensiones y aceptó la oferta del Barça, y otra en la que se explica que el fichaje del internacional alemán se vino abajo debido al precontrato con el Stuttgart, que el propio portero había incumplido. Al final el Oporto y Baía aceptaron las condiciones del traspaso y Andreas Köpke se quedaba sin cumplir su gran sueño, y optó por el Olympique de Marseille.